Re: Popper - Tierra del Fuego
Publicado: 27 Feb 2010 10:03
Espero que nadie se enoje por esto, pero no puedo leer ni escuchar hablar de Popper y no mencionar sus monedas, tan conocidas y apreciadas por los numismáticos argentinos.
El rumano, entre tantas cosas que hizo en su aventura en el Sur, también acuñó moneda, y “acuñó” literalmente, porque él mismo preparó los cuños y realizó las primeras labraciones, para luego encargar el trabajo a la Casa de Moneda.
El mismo Popper lo explica en una carta que le dirigió a Bartolomé Mitre y Vedia, enviándole las monedas que había acuñado para la colección de su padre –famoso numismático–:
«La falta de comunicaciones regulares entre Tierra del Fuego y la Capital de la República y también las constantes fluctuaciones del papel moneda han sido motivo para que las transacciones comerciales en aquel territorio se hagan en “gramos de oro” y la necesidad de evitar los inconvenientes que surgen del manejo de polvo y pepitas de este metal dio lugar a la acuñación de monedas de uno y cinco gramos cuya colección tengo el gusto de remitirle.
Las monedas A y B son de la primera acuñación ya agotada. Su poca esmerada ejecución se explica de las circunstancias que desde el cuño, el grabado, la laminación y acuñación hasta las mismas herramientas necesarias para cada una de las operaciones han sido hechas en el Páramo, por el que suscribe, y en un período en que carecía de los elementos más indispensables a semejante clase de trabajos.
Las C y D salen de la Casa de Moneda de esta capital, acuñadas como las precedentes con el oro natural y sin liga de Tierra del Fuego.- Emisión diez mil gramos. Ley oro 864, plata 132.-» (JANSON, Héctor Carlos “La Moneda Circulante en el Territorio Argentino”, Buenos Aires, 1998. Pág.281)
Lo que Popper llama monedas A y B son piezas de 5 y 1 gramo acuñadas por él mismo en El Páramo con fecha 1889. No agota, sin embargo, la totalidad de las piezas, por cuanto se conoce un tipo más de cada valor y alguna variante. Así lo expresa Cunietti: «Los cuños locales fueron grabados por Popper, y debieron de inutilizarse con suma facilidad atento a las variedades que conocemos de los dos valores. La pieza de 5 gramos del Museo Mitre muestra el campo granulado del anverso atravesado por una cartela con la palabra “Popper”; en cambio el ejemplar de la Academia Nacional de la Historia el apellido tiene como fondo un pico y una maza en sotuer.» (CUNIETTI-FERRANDO, Arnaldo J.: “Monedas y Medallas. Cuatro siglos de Historia y Arte”. Manrique Zago Ediciones. Buenos Aires, 1989. Pág.118). Estas piezas deben considerarse rarísimas, y en algunos casos son piezas únicas. Vemos aquí una pieza de 1 gramo acuñada en El Páramo.
Más comunes son las piezas acuñadas en Casa de Moneda, que Popper identifica como C y D, de 5 y 1 gramo que aquí podemos apreciar y, como dice Cunietti, «son de acuñación perfecta y no presentan variaciones.» (op. cit. Pág.118).
Se discute entre los numismáticos la naturaleza de estas piezas. Así, para Cunietti, «Las emisiones de Julio Popper en oro amalgamado con plata de 864 milésimos de fino deben ser consideradas monedas en el sentido más primitivo del término, esto es, piezas cuyo peso y aleación han sido garantizados por una autoridad privada.» (op. cit. Pág.118)
Para Morucci, en cambio, se trata de fichas: «según mi parecer se trata de una moneda privada o más propiamente de una lujosa ficha; primero por su función (se canjeaban por mercaderías en Punta Arenas), y de lujo por su valor metálico intrínseco, el oro.» (MORUCCI, Miguel A.: “Los pioneros del siglo XX y sus medios de pago en la Isla Grande de Tierra del Fuego”. Jornario de las XXVI Jornadas Nacionales de Numismática y Medallística. San Francisco, 2007. Pág.12)
Jorge Ferrari, por su parte, las llamó “fichas monetarias”.
Como vemos, se trata de un tema aún no resuelto, mas sean monedas, lingotes o fichas, lo cierto es que son una muestra más del ingenio de Julio Popper.
Saludos a todos (y perdón de nuevo por manchar de numismática este foro)
Hermógenes
El rumano, entre tantas cosas que hizo en su aventura en el Sur, también acuñó moneda, y “acuñó” literalmente, porque él mismo preparó los cuños y realizó las primeras labraciones, para luego encargar el trabajo a la Casa de Moneda.
El mismo Popper lo explica en una carta que le dirigió a Bartolomé Mitre y Vedia, enviándole las monedas que había acuñado para la colección de su padre –famoso numismático–:
«La falta de comunicaciones regulares entre Tierra del Fuego y la Capital de la República y también las constantes fluctuaciones del papel moneda han sido motivo para que las transacciones comerciales en aquel territorio se hagan en “gramos de oro” y la necesidad de evitar los inconvenientes que surgen del manejo de polvo y pepitas de este metal dio lugar a la acuñación de monedas de uno y cinco gramos cuya colección tengo el gusto de remitirle.
Las monedas A y B son de la primera acuñación ya agotada. Su poca esmerada ejecución se explica de las circunstancias que desde el cuño, el grabado, la laminación y acuñación hasta las mismas herramientas necesarias para cada una de las operaciones han sido hechas en el Páramo, por el que suscribe, y en un período en que carecía de los elementos más indispensables a semejante clase de trabajos.
Las C y D salen de la Casa de Moneda de esta capital, acuñadas como las precedentes con el oro natural y sin liga de Tierra del Fuego.- Emisión diez mil gramos. Ley oro 864, plata 132.-» (JANSON, Héctor Carlos “La Moneda Circulante en el Territorio Argentino”, Buenos Aires, 1998. Pág.281)
Lo que Popper llama monedas A y B son piezas de 5 y 1 gramo acuñadas por él mismo en El Páramo con fecha 1889. No agota, sin embargo, la totalidad de las piezas, por cuanto se conoce un tipo más de cada valor y alguna variante. Así lo expresa Cunietti: «Los cuños locales fueron grabados por Popper, y debieron de inutilizarse con suma facilidad atento a las variedades que conocemos de los dos valores. La pieza de 5 gramos del Museo Mitre muestra el campo granulado del anverso atravesado por una cartela con la palabra “Popper”; en cambio el ejemplar de la Academia Nacional de la Historia el apellido tiene como fondo un pico y una maza en sotuer.» (CUNIETTI-FERRANDO, Arnaldo J.: “Monedas y Medallas. Cuatro siglos de Historia y Arte”. Manrique Zago Ediciones. Buenos Aires, 1989. Pág.118). Estas piezas deben considerarse rarísimas, y en algunos casos son piezas únicas. Vemos aquí una pieza de 1 gramo acuñada en El Páramo.
Más comunes son las piezas acuñadas en Casa de Moneda, que Popper identifica como C y D, de 5 y 1 gramo que aquí podemos apreciar y, como dice Cunietti, «son de acuñación perfecta y no presentan variaciones.» (op. cit. Pág.118).
Se discute entre los numismáticos la naturaleza de estas piezas. Así, para Cunietti, «Las emisiones de Julio Popper en oro amalgamado con plata de 864 milésimos de fino deben ser consideradas monedas en el sentido más primitivo del término, esto es, piezas cuyo peso y aleación han sido garantizados por una autoridad privada.» (op. cit. Pág.118)
Para Morucci, en cambio, se trata de fichas: «según mi parecer se trata de una moneda privada o más propiamente de una lujosa ficha; primero por su función (se canjeaban por mercaderías en Punta Arenas), y de lujo por su valor metálico intrínseco, el oro.» (MORUCCI, Miguel A.: “Los pioneros del siglo XX y sus medios de pago en la Isla Grande de Tierra del Fuego”. Jornario de las XXVI Jornadas Nacionales de Numismática y Medallística. San Francisco, 2007. Pág.12)
Jorge Ferrari, por su parte, las llamó “fichas monetarias”.
Como vemos, se trata de un tema aún no resuelto, mas sean monedas, lingotes o fichas, lo cierto es que son una muestra más del ingenio de Julio Popper.
Saludos a todos (y perdón de nuevo por manchar de numismática este foro)
Hermógenes